OUR STORY
Todo empezó porqué, en el herbolario de siempre a se les terminó la lavanda que yo usaba para hacer los sacos térmicos de semillas, en otro herbolario, conecté muy rápido con la dependienta y nos pusimos a hablar sobre escuelas de terapias naturales, ella me habló de ISMET y así fue como empecé a estudiar Kinesiología, y allí conocí a Núria López (guardiana y mujer medicina de enseñanzas tradicionales del camino rojo). Una noche soñé con ella y a partir de ése día empezamos a hablar.
2013
Nos vimos por primera vez en la calle Aragó de Barcelona, habíamos quedado con todo el grupo para subir juntos hacia la montaña y éramos los primeros en llegar, íbamos a acudir a un seminario de enseñanzas espirituales del pueblo Lakota, guiado por Núria López.
Nos miramos a los ojos y le reconocí, le dije: tu me suenas mucho!
y él me respondió: pues yo creo que nunca coincidí contigo,
buscamos lugares posibles afines y nada, pero yo estaba tan segura, le acabé preguntando si quizás salía en la tele o en algún anuncio pero claro... el reconocimiento era álmico.
Él vivía en Menorca y yo en Tarragona y así pasaron los meses y los seminarios donde hacíamos los Inipis hacían de enlace entre el mundo físico y el espiritual y nos ofrecían el pretexto para vernos y conocernos, al mismo tiempo que nos abrimos a la tradición Lakota y sus ritos.
2014
Decidimos empezar juntos una nueva vida en Menorca y un día, caminando hacia cala Tortuga, empezamos a hablar sobre lo que nos gustaría hacer al hacernos viejitos, aquello que haces por pasión y amor, dejando a un lado la velocidad y la productividad, empezamos a hablar de poder compartir con el mundo nuestra visión de la salud, la visión holística de una salud basada en conocer, preparar, prevenir y equilibrar el cuerpo en lugar de llegar a la enfermedad para ocuparnos de la patología o dolencia. Hablamos de la medicina ayurvédica, a quien pagas por estar saludable y dejas de pagar al enfermar. Y fantaseamos con la posibilidad de crear un lugar donde se pudiesen combinar distintas técnicas terapéuticas con la finalidad de promover, cuidar y mantener lo más valioso: la salud, el bienestar...la vida.
Un día volviendo de un seminario canalicé un símbolo, justamente una de mis pasiones y dones es la simbología, pero no tenía ni idea ni referencias de él, le pedí a Mapi, una amiga que hacía Registros akáshicos que me ayudara con el significado de ése símbolo y me dijo: Marta siéntate por qué esto muy fuerte. Ese dibujo era la alineación astrológica de 3 planetas, y su capacidad es la de poder pedir al universo aquello que quieras manifestar en mi vida, una conjunción que solo sucede cada 30 años y justamente la fecha de esa conjunción estaba a solo 7 días. En mi vida esa alineación sucedería dos o tres veces. Así que no me lo pensé mucho, junto a Jordi hicimos un pequeño ritual pidiendo nuestro deseo, materializar nuestro proyecto terapéutico.
2015
En menos de un año, Fredi, (el papá de Jordi) se jubilaba y junto con mi recién llegada a la isla Cristina (la mamà de Jordi) y Fredi quisieron hacernos un regalo, nos invitaron a abrir el proyecto que quisieramos en el mismo local que dejaba por su jubilación con la posibilidad a que nos ayudaran los primeros meses con el alquiler para poder empezar.
Ése fue el empuje necesario para que sin dinero y con toda la energía disponible posible llegase ésa oportunidad única de poder hacer realidad nuestras peticiones al cielo, los dos decíamos, pero... ¿Cómo pagaremos todo?
Y sin saber muy bien, llegaba, a través de mucha ayuda y soporte de amigos, familia y nuestros pocos ahorros.
Inipi se inauguró, nació el 17 de abril de 2016.
